Invertir en una oferta pública inicial generalmente implica los siguientes pasos:
Investigue la empresa en los sitios web que ofrecen Pre-IPO: Antes de invertir en una oferta pública inicial, es importante investigar la empresa y su industria para comprender su modelo de negocio, posición competitiva, rendimiento financiero y perspectivas de crecimiento.
Revise el prospecto: La empresa presentará un prospecto ante el organismo regulador pertinente (como la SEC en los Estados Unidos) que proporciona información detallada sobre la empresa y la oferta. Los inversores deben revisar el prospecto detenidamente para comprender los términos de la oferta y los riesgos involucrados.
Haz un pedido: Los inversores pueden realizar un pedido de acciones a través de un corredor o una plataforma de negociación en línea. El precio de oferta generalmente lo establecen los suscriptores, y los inversores pueden realizar pedidos de acciones al precio de oferta o por debajo de él. Es importante tener en cuenta que no todas las OPI están disponibles para inversores individuales, y algunas pueden tener requisitos mínimos de inversión.
Esperar asignación: Una vez que se haya cerrado la oferta pública inicial, se notificará a los inversores si se ha completado su orden y el número de acciones que se les han asignado. El número de acciones asignadas puede variar según la demanda de la oferta y el número de acciones disponibles.
Comercio: Una vez asignadas las acciones, se acreditarán en la cuenta del inversionista y podrán comenzar a cotizar en el mercado público. Es importante tener en cuenta que el precio de las acciones puede ser volátil en los primeros días y semanas de negociación.
Invertir en una oferta pública inicial requiere una cuidadosa consideración de los riesgos y las posibles recompensas. Es importante realizar una investigación exhaustiva, comprender los términos de la oferta y consultar con un asesor financiero antes de tomar cualquier decisión de inversión.