La asignación de acciones en una oferta pública inicial suele estar a cargo de los bancos de inversión de suscripción. Los bancos suelen realizar un roadshow en el que presentan la empresa a posibles inversores y, en función de sus comentarios, los bancos determinarán la demanda de las acciones y cómo se debe asignar.
El proceso de asignación puede verse influido por varios factores, entre ellos:
Demanda de inversores: Los bancos asignarán acciones en función del nivel de demanda de los inversores. Los inversores que tengan un historial de participación en OPI pueden recibir prioridad.
Tamaño del pedido: Los inversores que realicen pedidos más grandes pueden recibir una mayor asignación de acciones.
Relación con el banco de inversión: Los inversores que tienen una relación de larga data con el banco de inversión pueden recibir un trato preferencial.
Tipo de inversor: Los inversores institucionales, como los fondos mutuos y los fondos de pensiones, pueden recibir prioridad sobre los inversores minoristas.
Ubicación geográfica: La asignación de acciones también puede verse influenciada por la ubicación geográfica del inversor. Por ejemplo, la empresa puede querer asignar acciones a los inversores en los mercados clave donde opera.
Vale la pena señalar que el proceso de asignación puede ser complejo y está sujeto a supervisión regulatoria para garantizar que sea justo y transparente.