Las empresas pueden prepararse para los requisitos continuos de información y divulgación después de una oferta pública inicial (OPI) mediante la implementación de prácticas eficaces de gobierno corporativo, el desarrollo de controles internos sólidos y la inversión en sistemas sólidos de información financiera. Además, pueden contratar profesionales legales y contables experimentados para garantizar el cumplimiento de las leyes de valores.
Los requisitos clave para mantener el cumplimiento de las leyes de valores incluyen:
Informes financieros: Las empresas que cotizan en bolsa deben presentar informes anuales en el Formulario 10-K, informes trimestrales en el Formulario 10-Q e informes periódicos en el Formulario 8-K. Estos informes deben cumplir con los Principios de Contabilidad Generalmente Aceptados (GAAP) y las pautas establecidas por la Comisión de Bolsa y Valores (SEC).
Uso de información privilegiada: Las empresas deben implementar políticas y procedimientos para evitar el tráfico de información privilegiada, que es ilegal y puede dañar la reputación de la empresa.
Divulgación: Las empresas deben divulgar información material a los inversores, incluida información financiera, asuntos legales significativos y cambios en la administración o la propiedad. Las empresas también deben cumplir con el Reglamento de divulgación justa (Reg FD), que exige que las empresas pongan la información material a disposición de todos los inversores al mismo tiempo.
Gobierno Corporativo: Las empresas deben establecer y mantener prácticas de gobierno corporativo efectivas, que incluyen una junta directiva sólida, comités de auditoría independientes y controles internos para garantizar el cumplimiento de las leyes de valores y prevenir el fraude.
Sarbanes-Oxley: La Ley Sarbanes-Oxley (SOX) exige que las empresas que cotizan en bolsa establezcan controles internos sobre los informes financieros y mantengan registros financieros precisos y completos. Las empresas también deben realizar evaluaciones anuales de sus controles internos y revelar cualquier debilidad material.
En general, mantener el cumplimiento de las leyes de valores es fundamental para que las empresas protejan su reputación, mantengan la confianza de los inversores y eviten sanciones legales y financieras.